Lastimosamente en El Salvador hay demasiados medios, con sus «periodistas» estrella, cuya función es proteger al poder y mantener cierto status quo, aunque cambien los que se sienten en las sillas oficiales.
A pesar de eso sí hay muchos periodistas valientes que día a día buscan la forma de hacerle llegar un poco más de verdad a los ciudadanos salvadoreños. Es tiempo que aprendamos a reconocer esta verdadera función periodística y dejemos atrás el entretenimiento noticioso con el que dormimos nuestras preocupaciones.